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Ravioli de calabaza con pollo y queso de cabra

Con esta receta participo en el Reto de Julio de Cocineros del Mundo propuesto por Giovanni Rana

Para participar debemos realizar una receta con alguna de las variedades de pasta fresca rellena de Giovanni Rana.

Ravioli de calabaza y cebolla caramelizada con pollo y queso de cabra

El día que me decidí a prepararla, me pasé a ver qué variedades había, y hubo una que me llamó mucho la atención: ravioli rellenos de crema de calabaza y cebolla caramelizada.

La mezcla me parecía la mar de sabrosa, así que me llevé un paquete, a la espera de preparar uno y ver exactamente si tenían el punto dulce que esperaba y qué podía añadirles para hacer un plato completo pero que no fuera pesado.

Así que llegué a casa y puse un cacito con agua a hervir. Abrí la bolsa, cogí uno de los ravioli y lo herví los 4 minutos que mencionaba el paquete.

Quedó suave y firme, en su punto. El sabor era suave y dulzón, poco especiado, así que admitía una buena condimentación. Y pensando en qué usar de acompañamiento me decidí por un poco de pollo macerado en vino blanco y hierbas y un poco de queso de cabra por encima.

El resultado: un éxito. El pollo le aporta la textura firme al plato y la parte especiada, y el queso de cabra, la parte cremosa y el punto saladito.

Os pongo los ingredientes para 3 platos:

– 1 paquete de ravioli de crema de calabaza y cebolla caramelizada Giovanni Rana
– 2 pechugas de pollo limpias
– 2 rodajas de queso rulo de cabra
– 1 vaso de vino blanco
– aceite de oliva
– hierbas provenzales
– pimienta de colores recién molida
– pimentón dulce
– sal

Preparación:

Ravioli de calabaza y cebolla caramelizada con pollo y queso de cabra

Antes que nada nos pondremos con el pollo. Limpiamos y troceamos las pechugas de pollo y las ponemos a macerar en un recipiente con el vino blanco, un poco de aceite de oliva, un puñado de hierbas provenzales, pimienta molida y un poco de sal. Lo dejaremos así una media hora.

Pasado este tiempo ponemos una sartén o un wok al fuego. Cuando esté caliente le echamos el pollo sin jugo y dejamos que se haga, de momento, sin añadirle aceite. Si vemos que suelta mucho jugo lo escurrimos para que pueda dorarse un poco. Entonces le añadimos un poco de pimentón y un chorrito de aceite. Lo dejamos que se dore un poco, apagamos el fuego y reservamos.

Ponemos el agua a hervir y le añadimos un puñado de sal cuando llegue a ebullición. Entonces añadimos la pasta y la dejamos los 4 minutos que dice en el sobre. Mientras, volvemos a encender el fuego de la sartén.

Cuando esté lista la pasamos a la sartén, sin escurrirla del todo, para que se añada un poco del agua de la cocción, y le añadimos un poco del queso de cabra en trocitos para que se funda. Lo salteamos un par de minutos y apagamos el fuego.

A la hora de servirlo le añadimos por encima un poco del queso de cabra que nos ha sobrado.

Ha quedado la mar de rico 🙂

¡Que aproveche!

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